lunes, 4 de julio de 2011

Las películas de Roberto Macho-Quevedo: "Blackthorn"


BLACKTHORN. PUNTUACIÓN: 7

Con su segunda película como director, el también guionista Mateo Gil ha hecho un estupendo western crepuscular a medio camino entre la realidad y la ficción, el mito y la leyenda, el homenaje y la revisión.
Sobria, sólida, melancólica, ...
respetuosa con las constantes del género y envuelta por un aroma clásico, Gil se acerca a la figura del famoso ladrón de bancos, Butch Cassidy. Y se acerca a través de las informaciones que dicen que no murió como se cuenta junto a su amigo Sundance Kid, cuando fueron tiroteados por el ejercito boliviano. Entonces nos muestra a un Cassidy mayor, solitario y apartado que vive en un rancho de Bolivia criando caballos y con otro nombre. Y lo junta a un español; un ladrón pero muy diferente a él.
Blackthorn es un homenaje a aquellos forajidos y ladrones de leyenda que hacían de esto su estilo de vida, es una homenaje a los viejos valores e ideales. Una obra sobre la libertad, el honor, la amistad masculina o el amor perdido. Pero, sobre todo, es una hermosa y contenida película sobre el ocaso, el crepúsculo y la vejez de hombres cansados que ven como su forma de vida se acabo, su época se ha terminado y no tienen cabida en un nuevo mundo en el que los principios y el honor parecen desterrados y los ladrones no tienen escrúpulos y roban a cualquiera.
Excelente y fundamental resulta la interpretación de Sam Shepard, este borda cada gesto, cada palabra y mirada. Junto a él actores como Eduardo Noriega o Sthephen Rea cumplen bien.
Destaca también el guión de Mateo Gil, donde demuestra su experiencia y buen hacer. Magníficos diálogos, un cuidado extremo sobre las claves del western, personajes bien trazados, escenas de acción buenas y dosificadas como la del desierto de sal o un inteligente uso de flashbacks muy sintéticos. Todo apoyado por una espléndida fotografía y grandes espacios abiertos.
Gil como director se muestra correcto y eficaz aunque no brillante y le falta mayor ritmo, fuerza, pasión y dinamismo narrativo, ya que resulta algo frío.
Blackthorn es la historia de un hombre que quiere volver a su hogar porque ya no puede volver a su vida anterior y porque se ha dado cuenta que no quiere seguir solo, aunque su condición de leyenda le condene a ello.
Blackthorn viene a sumarse a ese escaso número de westerns que se hacen en los últimos años y que merecen la pena. Es una buena película y además española.

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